Con la Gala Danny Rivera Sinfónico en el capitalino teatro Carlos Marx finalizó este domingo el Cubadisco 2009, ocasión en la que fue homenajeado el cantante puertorriqueño con el Premio de Honor del certamen.
Los organizadores de la fiesta del disco cubano también distinguieron al maestro Frank Fernández con el Premio Productor Fonográfico, en reconocimiento a la obra de la vida.
El recital ofrecido por quien es conocido en su país como el Cantante Nacional fue disfrutado por un público que ovacionó cada una de las canciones magistralmente interpretadas y acompañadas por la Orquesta Sinfónica Nacional dirigida por el maestro Enrique Pérez Mesa.
Varios momentos únicos e irrepetibles deparó la velada, y el primero de ellos fue cuando Danny invitó a escena a Frank Fernández, quien lo acompañó al piano en la interpretación, entre otras, de lo que se ha convertido en imprescindible en su repertorio, Madrigal, solicitada reiteradamente por el público que colmo la sala.
Faltaban emociones y la otra correspondió a la diva de la canción cubana, Omara Portuondo, que unió su voz a la de Rivera para, en un inigualable dúo ocasional, interpretar, como ellos sólo podían hacer y acompañados al piano por Frank, la siempre joven 20 Años, que hizo famosa a Maria Teresa Vera.
Danny Rivera le cantó al amor, la amistad, la familia, la libertad, al pueblo. Canciones con las que se formó, tal y como él mismo afirmó, entre ellas: Amar o morir, Ódiame, Con las alas rotas, Mi viejo, Amada amante, Los hombres de rabia lloran, Jesucristo, Libre, y Tu pueblo, entre otras.
También se hizo acompañar en algunas de sus piezas por el grupo vocal Novel Voz, y el Coro Nacional de Niños, a quienes, junto a Puerto Rico, estuvo dedicado además este Cubadisco 2009.
Como colofón de la velada, y cuando parecía que Cubadisco ya decía adiós hasta el año próximo, entró en escena Alexis Díaz Pimienta, para con su verso en seguidilla, recordar que la Feria del 2010 estará dedicada a la música campesina y a todos los repentistas del mundo.