lunes, diciembre 21, 2009

Kool and the Gang deleitaron a los cubanos






La Tribuna Antiimperialista José Martí una vez más ha sido testigo de un espectáculo sensacional cuando los músicos norteamericanos de Kool and the Gang se encontraron con sus admiradores cubanos de siempre y, como se esperaba, la química fue perfecta en un concierto organizado por el Instituto Cubano de la Música.

Inmenso fue el número de personas que acudieron a disfrutarlo y especial fue la atmósfera creada entre tantos que acompañaban las interpretaciones con las palmas, cantaban, bailaban, coreaban los estribillos o estallaban en aplausos ante los primeros acordes de viejas conocidas melodías, verdaderos éxitos de siempre, que marcaron a una generación. Ni la diferencia idiomática privó a los presentes de disfrutar intensamente esta única oportunidad.

Como bien dijera alguien, la sintonía fue absoluta y plena la complicidad entre los músicos y el público de unas 30 mil personas, que abarrotó todos los espacios disponibles hasta topar con el muro del malecón.

El idioma universal de la música, ese que toda la gente noble habla, sumado a la expresa voluntad de comunicarse con los cubanos y regalarles algo que desde hace muchos años deseaban, hicieron su papel y el resultado fue extraordinario.

Miembros de varias generaciones se unieron en la histórica Tribuna, mudo testigo de la presentación de otros artistas de talla internacional como estos y de especiales momentos de reafirmación revolucionaria.

El público lo disfrutó, pero los norteamericanos no se quedaron detrás. Fue poco más de una hora y media de ritmo, de funk, disco, soul, de melodías afroamericanas inolvidables como los antológicos Celebration, Joanna o Ladies’ Night.

No faltaron las coreografías improvisadas, tan de moda en nuestros días, y la recuperación de aquellos pasillos de moda en la década de los ochenta, cuando no se concebía una fiesta o reunión de bailadores sin la presencia de algunos de los hits de Kool and the Gang, grupo cultivador del Rhythm and Blues, fundado en Jersey City en 1964 y que saltó a la fama en 1973 con el álbum Wild and Peaceful.

Momento muy especial fue aquel cuando el músico líder de la agrupación, Robert “Kool” Bell, hizo entrega de una placa conmemorativa de la ocasión al presidente del Instituto Cubano de la Música, Abel Acosta, quien reconoció la valía de tan bello gesto y destacó que dicho obsequió quedará expuesto de manera permanente en el Museo Nacional de la Música como constancia de esta primera visita de Kool and the Gang a nuestra Isla.

La presidenta de la Internacional Association African American Music Fundation, la señora Dyana Williams, declaró que durante cuatro décadas esta agrupación insigne de la música negra norteamericana ha llevado su música a través de todos los continentes y que había venido a la capital de todos los cubanos para ofrecer su actuación a la familia cubana con mucho amor y dedicación.

Innegablemente fue una actuación estelar, sobre todo en los momentos de los solos realizados por cada instrumentista; pero el momento más álgido fue cuando el trompetista cienfueguero Alexander Abreu tocó en el escenario capitalino haciendo virtuosas florituras con su instrumento, junto al joven percusionista Yaroldi Abreu, colocados a la altura de los músicos visitantes, quienes pidieron ovaciones al público para tal intervención.

También el director de la agrupación cubana Havana D 'Primera acompañó a Kool and the Gang en la interpretación de Open Sesame, melodía que formó parte de la banda sonora Saturday nigth fever, película protagonizada por John Travolta en 1977. Esta pieza ha sido ganadora de 15 discos de platino en los Estados Unidos. En 1994 su tema Jungle boogie incluido por el realizador norteamericano Quentin Tarantino en la banda sonora de su famosa película Pulp Fiction, también está entre los más conocidos.

Los 11 músicos aparecieron vestidos de blanco en este emblemático escenario cubano, cuatro años después de que la banda Audioslave, también norteamericana, rompiera el hielo y se convirtiera en la primera agrupación estadounidense en ofrecer un concierto al aire libre en Cuba, en la misma Tribuna Antiimperialista José Martí.

Los principales miembros de la banda desde siempre han sido Robert “Kool” Bell, en el bajo; Ronald Bell en el saxo tenor; George Brown en la percusión; Robert Mickens, trompetista; Dennis Thomas como saxo alto; Claydes Charles Smith con la guitarra; Clifford Adams en el trombón, y Rick Westfield con los teclados.

Los músicos aseguraron que su visita a la isla era un intercambio cultural histórico esperado por ellos desde hace muchos años, que vinieron como músicos, no como políticos; y su líder Robert Kool Bell, declaró que en su formación musical y en esta visita a Cuba estaba presente la inspiración de su padre, quien visitó La Habana en la década del 50 del pasado siglo, cuando era boxeador profesional.

Esta primera presentación de Kool and the Gang en Cuba quedará como uno de esos sucesos dignos de mantener para siempre en la memoria popular, lleno de momentos alegres con artistas que nos mostraron su virtuosismo como cantantes e instrumentistas y su respeto por nuestro pueblo.

1 comentario:

Rocío González dijo...

(\ (\
(=':')
((")(")
Feliz Navidad
♥Ro♥