domingo, octubre 09, 2005

Jesús del Monte


Jesús del Monte es una de las barriadas urbanas de la ciudad de La Habana. Originalmente era un pueblito habitado mayoritariamente por emigrantes canarios, pero el crecimiento extraordinario de la capital hizo que se convirtiera en un barrio más de la ciudad. Su fundación data de mediados del siglo XVII junto al ingenio San Francisco de Paula.

Por allí poseía unos terrenos el sacerdote Cristóbal Bonifá de Rivera, quien en 1695 donó parte de ellos para establecer una iglesia en su zona más elevada. La iglesia se construyó en breve tiempo y fue declarada como auxiliar de una de las parroquias de La Habana en los meses finales del año 1698.

Desde los primeros años del siglo XVIII se establecieron en el naciente poblado algunos vegueros, quienes comenzaron a sembrar de tabaco todos los terrenos que orillaban los arroyos Agua Dulce y Maboa.

El tabaco comenzaba a tomar auge en la economía cubana y se obtenían grandes ganancias. Entonces España, con la finalidad de mantener el control de esta prometedora actividad económica, estableció en 1716 el Estanco del tabaco, que prohibía a los vegueros vender libremente su producción.

En 1723 los vegueros se rebelaron y se amotinaron en Santiago de las Vegas y Maboa por la incautación de sus cosechas, se reunieron en Calabazar unos mil descontentos en actitud sediciosa, y así se continuaron una serie de motines y levantamientos. El más importante fue el de la comarca habanera de Jesús del Monte.

El gobierno español envió doscientos hombres contra los amotinados, quienes se resistieron, pero finalmente fueron vencidos con el resultado de un muerto en la acción y doce colgados en represalia, allí en los árboles de Jesús del Monte, a pocos metros de la iglesia, donde permanecieron todo el día como señal de escarmiento a los demás rebeldes.

Las sublevaciones de los vegueros fueron las primeras manifestaciones de rebeldía entre los criollos.

En 1762, durante el sitio de La Habana por los ingleses, Jesús del Monte fue también teatro de varios encuentros, en uno de los cuales murió José Antonio Gómez, alcalde de Guanabacoa, conocido popularmente con el nombre de Pepe Antonio.

Cuando se restableció la paz y la vida en Jesús del Monte volvió a la normalidad, el pueblo continuó creciendo y progresando. En 1820 fue creado su ayuntamiento de acuerdo con la Constitución española de dicho año, que fuera suprimido en 1823 cuando cesó el régimen constitucional en España y fue convertido en arrabal o barrio extramuros de la capital.

Jesús del Monte vivió durante muchos años del incesante tráfico entre la ciudad de La Habana y sus comarcas meridionales, de la venta de sus frutos en la capital y de la manufactura de sombreros de paja a la que se dedicaban muchas familias obreras. Cuando se inició la explotación del ferrocarril entre La Habana y Bejucal las condiciones económicas de Jesús del Monte menguaron considerablemente.

Con el transcurrir del tiempo Jesús del Monte volvió a florecer, pero esta vez debido a que numerosas familias de La Habana, al poder trasladarse cómodamente hacia el lugar, se dieron cuenta de sus condiciones de clima y demás; y valoraron las posibilidades del lugar como sitio de veraneo y de residencia. Iniciaron desde entonces la construcción de innumerables viviendas modernas y confortables, claras y espaciosas en las cercanías de la popular parroquia, la que en nuestros días observa desde su posición cómo la ciudad de La Habana creció y se desarrolló a sus pies.

En la actualidad aquello es parte del Municipio de 10 de octubre, y la secular calzada lleva el nombre de Calzada del 10 de Octubre.