jueves, mayo 07, 2009

Excepcional concierto de José María Vitier en Bayamo


Con una inusual y armónica combinación de piano, voz lírica y percusión cubana, el destacado músico José María Vitier deleitó al público la ciudad de Bayamo.
Regreso cumpliendo la palabra empeñada hace un año, dijo el artista, pero ahora con una propuesta diferente, donde incluyó estrenos como Canción de cuna, Un ángel, Al alba el bosque y una improvisación a partir de una melodía compuesta por Chucho Valdés.
Esa hermosa iniciativa, denominada Improvisación a partir de un tema secreto, consiste en la ejecución in situ de un determinado fragmento, el cual se descubre en el espectáculo y está compuesto por uno de los nueve amigos que convocó para la ocasión, entre ellos Silvio Rodríguez, Liuba María Hevia y Hernán López-Nussa. Acompañado por los percusionistas Adel González y Luis Bárbaro Rodríguez, Vitier interpretó La comparsa, de Lecuona, así como sus piezas Pulso de Vida, Son nocturno y Oración por Cuba, donde la potente y dulce voz de la soprano lírica Bárbara
Llanes inundó el Teatro Bayamo. José Maria Vitier (La Habana, 1954) compuso obras para cine, teatro, ballet y danza, entre las que destacan clásicos como Misa Cubana, Salmo de las Américas, El Cantar del Caballero y Destino. Fue nominado al Premio Oscar por la banda sonora del filme Fresa y Chocolate, de Tomás Gutiérrez Alea, y trabajó para la televisión, donde musicalizó series emblemáticas como En silencio ha tenido que ser, Julito el pescador y La frontera del deber. Como parte de la gira nacional Paisaje Interior, iniciada en Guantánamo, el laureado pianista y compositor, acreedor de la Medalla Alejo Carpentier, actuará en el Teatro Manzanillo, de la urbe costera de igual nombre.

1 comentario:

Anónimo dijo...

In the sad refrain of the sunshine.

The soft and
gentle melody
of a sunshine appears
in the calm of
a delicate reason,
that mellow aperture
recalling, when
the down-pour
arrives, a tracing
present.

Francesco Sinibaldi